El Memorial Mound en Alabama, Estados Unidos, surgió como un intento de replicar las catacumbas romanas y brindar un espacio de descanso eterno para quienes ahí residieran, además de ofrecer todos los servicios funerarios.
Empezó a operar en 1992 y se anunciaba como “Las instalaciones más hermosas para ser sepultado en Estados Unidos”, y tal vez en esos años lo fue, pero desde el año 2000 quedaron abandonadas.
El mausoleo ofertaba todos los servicios por 2,285 dólares, que en ese tiempo era una ganga, para “terminar con los funerales costosos”, como publicitaban en sus folletos:
Sin embargo, la publicidad no funcionó como esperaban y terminaron por abandonar este negocio, cuyas instalaciones se encuentran a 2.5 metros bajo el terreno, con la idea de su creador, Clyde Booth, de imitar el sistema de las catacumbas para proteger y conservar a los cadáveres.
Los restos eran apilados en estructuras metálicas de hasta 8 niveles y así evitaban ser enterrados. Sin embargo, los familiares no tenían acceso al área de los féretros, solo podían dejar flores a las afueras del lugar o bien, colocar un busto o placa de bronce en un enorme muro de mármol dentro de la estructura.
En este sitio también se podían comprar los ataúdes, a precio de mayorista, con la compañía Booth, Caskets & Memorial Wholesale Co, pero la mayoría de los que llegaron provenían de otras funerarias y no fueron tantos como se esperaba.
Luego de un tiempo dejaron de promocionar este lugar, lo que su dueño consideró como “una conspiración”, hasta que las deudas lo hicieron cerrar. Booth murió a los 89 años, en 2009, pero desde años atrás ya estaba cerrado el mausoleo.
Por supuesto, hubo saqueo y reportes de lo que ahí se encontraba.
En 2015, un youtuber llamado entró al lugar y grabó todo. Resulta increíble que un lugar como este simplemente haya quedado abandonado, pero más, que todavía encontrara cadáveres dentro…
Si estás listo, vamos a ver el video:
Luego de la aparición del video, las autoridades recataron 7 cuerpos de adulto y uno de un niño, y los sepultaron en un cementerio cercano, y desde entonces cerraron definitivamente el acceso al lugar, y lo mantienen vigilado las 24 horas del día.