Sus arduas y largas horas viendo una de las mejores series animadas del siglo XX por fin le dio frutos a este fan, que obtuvo un doctorado haciendo su tesis sobre Los Simpson.
Alejandro Tovar es un intelectual muy inteligente que convirtió su pasión por los Simpson en toda una línea de investigación académica, que le ha dado muy buenos resultados por analizar a la serie en general y a sus personajes más importantes.
Algunos “lameloides” piensan que ver Los Simpson es una pérdida de tiempo, pero este español demostró que esta serie de 1987 es una valiosa fuente de conocimiento y que puede ser usada con fines educativos. Incluso existe un curso en la Universidad de Glasgow llamado “Filosofía de Homero Simpson”.
Tovar es doctor por las universidades de Sevilla, Málaga, Huelva y Córdoba. En noviembre defendió una tesis de 437 páginas acerca de cómo la serie es un reflejo satírico de las sociedades actuales, sus medios de información y cómo sus personajes son los estereotipos de hombres y mujeres contemporáneos.
Identificado como un “doctor friki”, Alejandro dice que la serie es una ficción que supera a la realidad en la medida que sus predicciones se cumplen, como en el caso del presidente Donald Trump o los incontables augurios que hacen y resultan volverse reales. La serie no solo retrata, sino que contribuye a construir la vida social.
Una de las cosas que más impactaron de su tesis fue la cuestión del género a partir del análisis que hizo de Homero y Marge Simpson. Según este geniecillo, estos personajes expresan la forma de vida a la que mucha gente aspira, aunque tengan sus inconvenientes.
Comenzando con las damas, para Alejandro, Marge es hija de un inmigrante francés, con mucha sensibilidad artística y cuenta con estudios profesionales. Está llena de sueños y aspiraciones de fama, pero todo se ve truncado por su disfuncional familia.
Es entonces cuando la artista se vuelve ama de casa abnegada, con ocasionales momentos de triunfo y que intenta que su hija Lisa haga lo que ella no pudo: tener una vida independiente y reconocida por la sociedad.
En el caso de Homero, el doctor Tovar asegura que representa lo que un hombre no debe ser: machista, alcohólico, voluble y enojón. Pero no todo es malo en él, pues de hecho es el único en la familia amarilla que se atreve a ser un emprendedor.
A Homero no le basta su trabajo como inspector de seguridad en la planta de energía nuclear y constantemente está buscando nuevos oficios y oportunidades de hacerse millonario. Aunque descuidado, ha hecho varios inventos y por momentos ocupa puestos importantes dentro de la ciudad de Springfield, aunque sea muy cruel.
Otra crítica en su tesis trató sobre el periodismo sensacionalista que solo busca atraer la atención de los consumidores de su información, sin importarles lo que sus contenidos están provocando en la sociedad; crítica que bien podría valer para cualquier medio de información actual.
También señaló que los padres de hoy solamente “enchufan” a sus hijos a los televisores o celulares, sin importarles lo que están viendo.
Pero como dijo el mismo Homero, la televisión da mucho y pide poco; la muestra está justamente en el título de doctor de Alejandro quien, gracias a sus horas de análisis televisivo, pudo conseguir un alto reconocimiento académico.
Si eres de los que disfrutan sus absurdas aventuras, te sabes sus mejores frases y conoces sus miles de referencias, no pierdas tu tiempo; pues tal vez una universidad está esperándote para darte un doctorado en Los Simpson como a este nerd.