La pasión de los aficionados al futbol es legendaria: aunque en muchas ocasiones no va más allá de cánticos de apoyo vocal por su equipo o de la incondicional defensa de su desempeño, sin importar que no haya ganado un solo partido importante en 35 años, a veces los fanáticos van más allá y terminan rebasando los límites hasta extremos insospechados.
De entre las fanaticadas de todo el mundo, la inglesa destaca en cuanto a lo lejos que llegan, tanto es así que dio origen al término hooligan, un fan que está dispuesto a los actos vandálicos o criminales más increíbles para “apoyar a su equipo”. Con el advenimiento de la Copa Mundial Catar 2022, las autoridades han advertido que introducir drogas al evento podría ser penado con la muerte y están especialmente pendientes de los aficionados británicos.
En Catar no toleramos junkies, señor
En Catar, donde el wahabismo es imperante (esa doctrina es una modalidad considerada “puritana” de la islámica), se toman muy en serio el control de drogas y sustancias intoxicantes, por lo que no sorprende que las penas para quienes alteren el orden y trafiquen con psicotrópicos sean muy altas. Catar ya emitió la advertencia de que se llevarán a cabo detenciones arbitrarias, sin necesidad de debido proceso, en esos casos.
La novena ley de Control y Regulación de Drogas Narcóticas y Sustancias Psicotrópicas Peligrosas de 1987 (NDDPS, por sus siglas en inglés) de Catar impone penas entre 10 y 20 años por tráfico de drogas como la cocaína, así como multas entre 55 mil y 110 mil dólares. Además, se pondrá especial atención en los fanáticos ingleses, se harán revisiones extraordinarias, se extenderán las penas a cómplices y acompañantes y la reincidencia podría ser penada con cadena perpetua o incluso la muerte.
Nos referimos a ustedes (principalmente)
A pesar de que las declaraciones de las autoridades dejaron en claro que no habrá excepciones y que las sanciones serán aplicadas a todos los asistentes, sin importar cuál sea su origen o su situación, también es seguro que el grueso de los esfuerzos por controlar las actividades ilícitas que involucren drogas tendrán como foco a los asistentes ingleses por su “fama”.
En recientes, y lamentables, episodios del futbol inglés, el tráfico y consumo de drogas han empañado gravemente la imagen del público británico, con el incidente ocurrido en el estadio londinense de Wembley, siendo, sin duda, uno de los casos más sonados, el 11 de julio de 2021, con la final de la Eurocopa 2020 como marco: “Maleantes sin boleto, borrachos y drogados, tomando por asalto (el estadio de) Wembley hicieron temer a los asistentes por su vida”.
La “Gran C” es la culpable: medidas estrictas
La identificación del consumo y tráfico de cocaína por parte del agente Mark Roberts, líder de vigilancia policíaca del futbol en Reino Unido, como una de las causas más claras de los recientes incidentes relacionados con violencia o conductas antisociales durante justas de futbol inglés, fue un factor decisivo para la implementación de las medidas extraordinarias que se observarán durante el mundial catarí.
Cualquier fanático que tenga un comportamiento indebido podría ser sujeto, además (de las sanciones policiales pertinentes en Catar), a una orden de veda a la asistencia a eventos de fútbol a su vuelta al Reino Unido, así como también podría ser arrestado y acusado de ofensas que cometiese en Catar.