Si cualquiera de tus seres queridos está en peligro, no dudarías en hacer todo lo posible por ayudarlo y para Kaleb Bentham su perro Buddy es parte de la familia, así que no lo pensó dos veces antes de correr en su ayuda, aunque se enfrentaba a una bestia feroz.
Kaleb vive en Nevada, Estados Unidos, y se estaba preparando para celebrar el Día de Acción de Gracias, cuando de pronto, escuchó un fuerte gruñido afuera de su casa y salió a investigar. Lo que vio fue una escena terrible: su amigo más fiel, su perro Buddy de 40 kg, estaba siendo atacado por un enorme oso que lo tenía agarrado de la cabeza con las fauces.
A pesar de que era una bestia con afiladas garras y más de 160 kilos de pura fuerza salvaje, este hombre no iba a dejar morir a su compañero, por lo que se arrojó contra el oso, lo tacleó, lo agarró de la garganta y comenzó a golpearlo en la cabeza para que soltara a Buddy.
Increíblemente, Kaleb logró que el oso dejara al perro y huyera. Entonces este héroe se apresuró a llevar a su mascota a un hospital para que lo atendieran. La primera veterinaria en su camino estaba cerrada y él temía que Buddy no lo lograra.
Por suerte, en su segunda parada, en el hospital veterinario Mother Lode, tenían una sala de cirugía lista cuando Kaleb y Buddy llegaron. Los médicos empezaron la operación para ayudar al can, mientras tanto, su dueño se quedó esperando en la puerta de la sala de operaciones por más de tres horas y media.
Afortunadamente, Buddy sobrevivió, le pusieron un cono para ayudar a su recuperación y en la misma noche del Día de Acción de Gracias estaba en casa con su dueño, descansando de una terrible experiencia.
Lo malo es que aún no han detenido al oso y Kaleb tiene la preocupación de que en otro descuido este ataque se repita. Esperemos que pronto los servicios de protección en Nevada puedan hacer algo para alejar a este oso del hogar de Buddy.
Aquí les dejamos un video en el que este valiente hombre cuenta cómo salvó a su mascota de las fauces de una bestia. Los perros son nuestros mejores amigos y no dejaríamos que nada malo les pasara. Kaleb merece un aplauso por su valor y Buddy, un gran hueso para ayudarlo a recuperarse.