Si algo nos duele mucho es que la comida nos lastime, pues nunca desconfiamos de esta ni creemos que pueda ser mortal para nosotros, como cuando creces y resulta que eres intolerable a la lactosa o alérgico a los camarones. Al contrario, lo único en lo que podemos pensar cuando hablamos de ella es en su rico sabor y su efecto reconfortante.
Sin embargo, después de leer esta lista quizá quieras revisar mejor tu dieta o pensar en que hasta una cerveza (sí, tu mejor amiga) puede traicionarte cuando menos lo esperes. Conoce los diez casos en que los alimentos han resultado ser extrañamente mortales para quienes los comen y procura obtener algunas lecciones de buenos hábitos alimenticios para que la muerte no te sorprenda comiendo.
1. Chícharos en un campo de concentración en Ucrania
En 1942, los prisioneros de un campo de concentración ucraniano fueron alimentados con grandes cantidades de chícharos que contenían un aminoácido tóxico que les causó parálisis en las extremidades inferiores. Todos ellos vivieron arrastrándose durante su estancia en el campo y 117 de ellos quedaron paralíticos para toda su vida. El chícharo (Lathyrus sativus) que les fue suministrado se usaba principalmente como forraje y contenía el aminoácido oxalildiaminopropiónico que causaba latirismo, un padecimiento que afecta la médula ósea. Además, eran alimentados con un pan de cebada que contenía un 20 por ciento de paja, lo cual llevó a muchos prisioneros a enfermarse de gravedad. Estos tuvieron que montar una huelga de hambre para exigir atención médica, pero ya era demasiado tarde para algunos.
2. Mexipak, el trigo que Iraq recibió de México
En 1971, Iraq atravesaba una larga sequía, por eso decidió importar el trigo mexicano “Mexipak” de alto rendimiento que sería destinado al ganado. Estos costales de grano habían sido rociados con metilmercurio, un potente fungicida que lo protegería durante el viaje. Sin embargo, debido a que los cargamentos llegaron después de la época de siembra y a que no tenían etiquetado en la lengua de Irak, los granjeros no se dieron cuenta de que era un producto tóxico e hicieron pan con él. Además, lo regaron por ríos y envenenaron las aguas, peces y aves. Las consecuencias fueron desastrosas, la gente comenzó a presentar síntomas de insensibilidad en la piel y espasmos musculares que no podían controlar (ataxia). Oficialmente se reportaron 650 decesos, pero se estima que hubo el triple de muertos.
3. El derrame de cerveza en Londres
La inundación de cerveza ocurrió el 17 de octubre de 1814 debido a que uno de los contenedores industriales de la cervecería Meux de Tottenham se rompió, causando la ruptura de otros contenedores que terminaron por liberar 1 470 000 litros de cerveza, que inundaron las inmediaciones del lugar y provocaron la muerte de siete personas. La cervecería se encontraba en St. Giles, un barrio pobre, por lo que la inundación mató a gente que vivía en sótanos. La empresa fue sometida a juicio, pero se dictaminó que todo había sido un accidente y no se encontraron responsables.
4. El picante que le perforó la garganta a un hombre en San Francisco
En 2016, un hombre que participaba en un concurso que consistía en resistir a las salsas más picantes sufrió gran dolor al probar la salsa hecha con el chile Bhut jolokia o chile fantasma. La reacción fue tan tremenda que vomitó, tuvo dolor en el pecho y en el estómago. Fue trasladado de inmediato a Urgencias y tras análisis de rayos X y ultrasonidos, dictaminaron que su esófago había quedado perforado, razón por la que fue inmediatamente operado. Sin embargo, al realizar la cirugía, los doctores encontraron que también presentaba un hoyo de 2.5 centímetros en su garganta. El hombre pasó 14 días intubado y un total de 23 internado en el hospital.
5. El rey de Suecia que comió hasta morir
El rey Adolfo Federico de Suecia fue uno de los reyes que marcó el pasó de la monarquía a la cuasi república, su influencia política fue débil pero su muerte fue memorable, pues de sus manos Suecia pronto pasó a ser una monarquía constitucional, lo que quiere decir que el rey sólo cumple funciones simbólicas. Este monarca era conocido por su amabilidad con la servidumbre y su goce de la vida, lo que se vio demostrado en la naturaleza de su peculiar muerte. El 12 de febrero de 1771, después de sufrir las privaciones de la cuaresma, el rey se regaló a sí mismo un gran banquete en el que comió langosta, caviar, chucrut y arenque ahumado pasados por la garganta a golpe de grandes cantidades de champaña. Además, tomó 14 porciones de semla, un postre típico escandinavo. Al final, la comilona del rey le trajo la muerte aquella misma noche y desde entonces fue conocido como “The King who ate himself to death” o “El rey que se comió hasta a la muerte”.
6. La enfermedad de Minamata
El caso de la ciudad de Minamata se trata de uno de los peores desastres industriales del siglo XX. La empresa Chisso, que se instaló en 1906 en la región y producía metaldehído útil para la fabricación de plásticos, utilizaba mercurio como catalizador y los sobrantes del azogue los vertía en el mar, donde se volvían metilmercurio, sustancia que asimilaban los peces y otras criaturas marinas. De esta manera, los animales del mar quedaron contaminados y, por ende, los habitantes de Minamata, pues era un pueblo que se alimentaba principalmente de productos marinos.
En 1956 se empezaron a presentar los primeros casos de la enfermedad Chisso-Minamata, que consistía en espasmos incontrolables y reducción del campo visual. Sin embargo, fue hasta después de varios años que se supo que la causa del envenenamiento y de la enfermedad eran los residuos tóxicos que la empresa Chisso vertía en el mar. Hasta el día de hoy, los habitantes de la ciudad de Minamata enfrentan las secuelas de la contaminación de esta empresa.
7. Explosión de melaza
El 15 de enero de 1919 en la Purity Distilling Company de Boston, un tanque de 12 000 toneladas que contenía melaza se fracturó debido a la expansión térmica del metal, producto de las altas temperaturas de un día caluroso. El calor provocó que el tanque de metal explotara y produjera una ola de dos pisos de altura que contenía 2.3 millones de galones de melaza moviéndose a 35 mph. Aparte de la melaza, el tanque causó muchos daños, ya que sus trozos puntiagudos y afilados fueron lanzados como proyectiles. Debido a la negligencia de no contar con tanques adecuados y resistentes, la empresa fue declarada culpable y tuvo que pagar una indemnización de un millón de dólares, sin mencionar que limpiar el desastre les llevó 87 000 horas. Por si fuera poco, el olor de la melaza quemada se quedó impregnado en el lugar durante años.
8. Bullying alérgico
Se trata de una forma de bullying que atenta directamente contra la salud de la víctima, pues los abusadores ignoran que esta padece alguna alergia a algún alimento y la ponen en contacto con él. El caso más sonado es el de una niña de 12 años alérgica al cacahuate. Después de que sus compañeros le embarraran crema de maní, la pequeña enfermó de gravedad, comenzó a sentirse sofocada, sus pulmones empezaron a fallar y sus labios se tornaron azules. Luego de descubrir que se trataba de una alergia, el equipo médico tuvo que impartir pláticas para advertir sobre los peligros del acoso escolar y las alergias.
9. Cerveza contaminada en Mozambique
El 9 de enero de 2015, después de celebrar un funeral en Mozambique, 75 personas murieron misteriosamente y otras 230 enfermaron sin explicación alguna. Diez meses después, en noviembre de 2015, las autoridades determinaron que todas las muertes fueron causadas por un elemento en común: la cerveza consumida durante el funeral, pues esta estaba contaminada.
10. Explosión de un molino en Minneapolis
El 2 de mayo de 1878, el molino Washburn de Minneapolis, una edificación de siete pisos, produjo un estruendo que sorprendió a todos; se trataba del sonido de una gran explosión. El saldo del siniestro fue de 18 personas muertas y varios hogares incinerados. La explosión se debió a un chispa producida por el roce de dos engranes del molino que encontraron en el exceso de harina en el aire una suerte de pólvora. Este fenómeno se conoce como dust explosion y también puede desatarse en lugares donde existan altos niveles de azúcar, leche en polvo y polen. El incidente fue tan impactante que cambió la manera en que los molinos eran construidos.