Actualmente, estamos viviendo en una realidad totalmente diferente a la que conocíamos debido al coronavirus, los dispensadores de gel antibacterial están por todos lados con el fin de mantener las manos limpias y los cubrebocas no nos dejan ver la expresión facial de la gente a nuestro alrededor.
Hace unos días se celebró una reunión de trabajo en el municipio de Brihanmumbai, Mumbai, en la India, y en la mesa, como ya es costumbre en nuestros días, había frascos personalizados de gel antibacterial para garantizar la constante desinfección de las manos de los participantes. Sin embargo, de entre todos los presentes, no faltó el despistado. Se trata de Ramesh Pawar, quien confundió el envase con una botella de agua y, sin darse cuenta, le dio un buen trago para calmar un poco la sed que tenía.
Seguramente esto lo percibió de manera inmediata, pues a diferencia del agua, el gel antibacterial sí tiene sabor y uno muy amargo, por cierto. El hombre ya le había dado el sorbo y su gesto lo podía expresar por completo. Afortunadamente, no alcanzó a ingerir el gel, quedando como una anécdota chusca entre los asistentes a la mesa de trabajo.
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No cabe duda de que todo ha cambiado drásticamente y algunos artículos médicos se han vuelto parte de nuestro outfit del día. Además, las confusiones también son algo de lo que no estamos exentos. Es toda una locura de la que jamás pensamos que fuéramos a ser protagonistas, y no es para más. Aún no logramos adaptarnos del todo al nuevo ritmo de vida y esto se ve reflejado en este tipo de acciones.
