Lo que todos sospechábamos es cierto: la temible “gripe de los hombres” existe. Sí, las mujeres no lo creen y se burlan de nosotros cuando estamos en agonía. Normalmente dicen que exageramos los síntomas que para ellas son cualquier cosa, pero la ciencia nos ha dado la razón.
Es común que la mujer ignore al hombre cuando está resfriado y siente que está con un pie en la sepultura. Porque claro, está acostumbrada a vernos llevar a cabo todo tipo de tareas similares a los trabajos de Hércules. Pero todos hemos sentido la injusticia de ser menospreciados en la enfermedad aunque tosamos un pulmón completo.
Ahora podremos restregarles en la cara las palabras de la ciencia, seguramente lo negarán, pero los hechos son que un investigador de Canadá, Kyle Sue, probó que el “resfriado de los hombres” es una realidad.
El doctor Sue, un profesor asistente clínico de medicina familiar de la Universidad de Newfoundland, llegó a la conclusión de que los hombres no inventamos los síntomas ni los exageramos ni ponemos excusas, sino que tenemos sistemas inmunes menos desarrollados que los de las mujeres.
En su artículo publicado en el British Medical Journal, Sue escribe: “La mitad de la población en el mundo es masculina y se considera que ‘exageran’ los síntomas de las enfermedades respiratorias sin evidencia científica, eso podría tener implicaciones importantes en la salud de los hombres, incluido el insuficiente cuidado médico”.
En su investigación, Sue encontró no solo que la testosterona puede reducir al sistema inmune, sino que las tasas de hospitalización y muerte por complicaciones de resfriados son mucho más altas en hombres que en mujeres.
Incluso descubrió que las mujeres responden mejor a las vacunas contra la influenza. “Los hombres podrían no estar exagerando los síntomas sino que tienen sistemas inmunes más débiles para responder a los virus de las enfermedades respiratorias, lo que lleva a una mayor mortalidad que en las mujeres”.
En un intento de explicar las razones evolucionistas del fenómeno, sugirió que se podría si los hombres con sistemas inmunes fuertes tienen menos éxito con las mujeres en comparación con los hombres atractivos con niveles altos de testosterona y con sistemas inmunológicos más débiles.
Así que ahora tenemos a la ciencia de nuestro lado al afirmar que nuestras posibilidades de supervivencia aumentan si nos tiramos en el sofá, conservamos nuestra energía y convalecemos viendo Die Hard.