Como si las modas de otros tiempos dieran vuelta y regresaran a la actualidad, la barba se ha convertido en una tendencia entre los hombres de diferentes edades; esto se ha venido acompañando de una serie de mitos y verdades, en especial sobre la sospecha de ser nido de bacterias.
Sin embargo, un reciente estudio realizado por investigadores del Hospital Brigham and Women de Boston reveló que los hombres con barba son menos propensos a albergar infecciones causadas por bacterias resistentes a los antibióticos, en contraste con los hombres afeitados. ¡Déjala crecer!
Según la investigación publicada en el Journal of Hospital Infection, los investigadores del Hospital Brigham and Women, en Boston, limpiaron los rostros de 408 trabajadores del hospital del sexo masculino, con y sin barba. Después de probar los hisopos, encontraron que los participantes afeitados eran tres veces más propensos a alojar la bacteria Staphylococcus aureus o MRSA, resistente a la meticilina. Los investigadores plantearon la hipótesis de que el afeitado puede causar micro-abrasiones en la piel que atraen a las bacterias.
La MRSA es una infección común, y a menudo es adquirida por aquellos que pasan tiempo en los hospitales. La infección suele ser leve, emerge como una espinilla o con una mordedura que llega a dar comezón y resultar molesta; eso puede convertirse en focos de pus que requiere drenaje quirúrgico.
En casos muy severos, la MRSA puede causar infecciones peligrosas en huesos, articulaciones, vías urinarias, torrente sanguíneo, válvulas del corazón y pulmones; según la Clínica Mayo. Esto puede dar lugar a la propagación de la infección y, en casos severos, la muerte.
Dicho esto, es importante tener en cuenta que la presencia de MRSA en la piel de una persona no indica que tiene o tendrán una infección. Y los investigadores no evaluaron si los resultados de MRSA positivos contribuyeron a mayores tasas de enfermedad.
El estudio, titulado “ecología bacteriana del vello facial de los trabajadores del hospital: un estudio transversal”, también encontró que los hombres afeitados eran 10 por ciento más propensos a tener la bacteria común Staphylococcus aureus, que a menudo causa infecciones de la piel y las vías respiratorias, así como la intoxicación alimentaria.
Las investigaciones tuvieron lugar en un hospital donde se tomaron muestras faciales de más de los 408 hombres, con y sin barba. Los investigadores especulan que las abrasiones generadas al afeitarse se convierten en espacios de cultivo para la peligrosa bacteria.
Eso podría ser cierto, según Michael Mosley, anfitrión de Trust Me I’m a Doctor de BBC. En el programa enviaron muestras de más de 100 hombres a un microbiólogo con la intención de descubrir qué podría crecer a partir de ellas en placas de petri.
¿La respuesta? Muchas cosas. Además de una gran cantidad de bacterias benignas, encontraron algo curioso –en algunas muestras-, algo parecía estar matando a algunas bacterias. Las bacterias son microorganismos sofisticados que compiten unos con otros por recursos, igual que los animales. De acuerdo con el biólogo, es posible que algunas de las bacterias encontradas en las barbas hayan evolucionado para liberar toxinas que eliminen a su competencia.
Mientras tanto, otro estudio, llevado a cabo por la BBC denominado “Creeme, soy un doctor “, del científico británico Dr. Adam Roberts de la Universidad College de Londres, fue capaz de localizar más de 100 bacterias diferentes de muestras de barba y aislar un microbio llamado Staphylococcus epidermidis, que mata a otras bacterias que podrían ayudar a desarrollar nuevos antibióticos.
“Cuando usted consigue un entorno competitivo como una barba donde hay muchas bacterias diferentes, luchan por los recursos alimenticios y espacio, por lo que producen cosas como antibióticos”.
El Dr. Roberts probó incluso con éxito una fórmula contra el E. coli que causa infecciones del tracto urinario. Su estudio es visto como un gran avance, ya que no se han lanzado al mercado nuevos antibióticos durante los últimos 30 años. Infecciones resistentes a los antibióticos matan a al menos 700 mil personas al año, y prevé que aumente a 10 millones para el 2050.
No resulta sorprendente desde un punto de vista histórico. Mientras que la práctica de afeitarse está muy arraigada, durante mucho tiempo los humanos (o sus predecesores) fueron incapaces de deshacerse de su pelo corporal. No tendría sentido que esos genes sobrevivieran si tener una barba fuera nocivo para la salud.
Si bien cada uno tiene sus preferencias estéticas, la barba puede ser muy beneficiosa para su salud.