Hay muchas maneras de hacer esculturas, ya sea en arcillas, piedra, pastas o mármol, pero el artista italiano Valeriano Fatica eligió la comida como su materia prima para expresarse y decorar.
Sus manos convierten comida como sandías, calabazas, patatas, zanahorias, aguacates, queso, entre otros deliciosos manjares en verdaderas obras de arte con un minucioso detalle. Están tan bien hechas que ni siquiera dan ganas de comérselas.
Este artista pasa mucho tiempo jugando con la comida, pero claramente no es cualquier tipo de juego. A continuación te traemos algunos de sus mejores trabajos. Esperamos que no tengas mucha hambre, pues los que estás a punto de ver quizá te abra un poco el apetito.