En la vida de todo varón llega el momento en el que debe comprar un auto. Es un paso muy importante para todos nosotros porque además de que por fin tendremos un vehículo propio, aprenderemos mucho sobre finanzas y la manera en la que tomamos decisiones.
Debido a la tecnología de Internet, actualmente tenemos un amplio mundo de posibilidades para adquirir un automóvil, así que la pregunta es ¿cómo vamos a elegir el coche perfecto para nosotros entre tantas opciones? Se requiere de planeación, ahorro, tener disciplina, mucha paciencia y ser totalmente honestos con nuestra economía.
El auto perfecto para ti está en algún lugar esperando que lo manejes, pero antes de llegar a él debes comenzar a hacerte estas preguntas. Al responderlas, te irás haciendo de una mejor idea de cuál es el vehículo que se ajusta a tus medidas.
1. ¿Para qué lo necesitas?
Todos tenemos necesidades diferentes. Hay personas que requieren un vehículo solo para ir de su casa a su trabajo o llevar a sus hijos a la escuela, mientras que otros solo lo quieren para pasear con la pareja o lo necesitan por su empleo. Lo primero que tienes que hacer es definir el uso que le darás.
Debes tener bien claro el número de personas que ocuparán el vehículo regularmente, el tipo de caminos donde lo conducirás, si cuentas con espacio para resguardarlo y sus dimensiones. Si el auto solamente lo usas tú o tú y tu pareja con alguno que otro pasajero ocasional y lo conducirás exclusivamente en terrenos urbanos, te convendría un modelo compacto. Pero si necesitas transportar mercancía a través de sitios con caminos muy diferentes, podrías considerar comprar una camioneta.
Estos son solo ejemplos para mostrarte que la necesidad es la piedra angular de tu plan para comprar un vehículo.
2. ¿Cuánto tienes ahorrado?
Todos quisiéramos contar con el dinero suficiente para llegar a cualquier agencia de autos, elegir el coche que más nos guste en ese momento y comprarlo de contado con puro efectivo. Sin embargo, son muy pocos los que pueden vivir ese sueño. La mayoría de nosotros necesitamos hacer cuentas sobre nuestros ingresos y gastos.
Actualmente, la mayoría de los carros se compran a crédito y para empezar debes considerar la cantidad con la que cuentas para el enganche. Expertos como los de Motorpasion recomiendan que debes empezar a ahorrar para al menos pagar la mitad del valor total del auto. Este dinero debe estar en tus manos o tu cuenta bancaria precisamente para cubrir este gasto.
3. ¿Cuál es tu presupuesto?
Es hora de ponerse a hacer cuentas y en este punto tienes que ser brutalmente honesto porque los números no mienten. Debes hacer un análisis de tus ingresos fijos, y extras si los tienes, y los gastos fijos y extras que tienes mensualmente. Por gastos fijos, nos referimos a cosas como la despensa y servicios de vivienda, y extras serían los gastos en paseos, viajes, obsequios y esos “gustitos” que todos tenemos.
Es momento de restar tus gastos de tus ingresos y lo que quede se podrá convertir en las mensualidades de tu vehículo, porque esa será tu capacidad real de pago. Puedes aumentarla eliminando los gastos extras y limitando en lo posible los fijos, pero jamás debes salirte de ese presupuesto.
Además, tienes que tomar en cuenta que al adquirir un auto tendrás otros gastos, que entrarán como fijos de tu dinero. Aquí debes tomar en cuenta gasto de gasolina, seguro, tenencias, refrendos, servicios y reparaciones.
Afortunadamente, en muchos lugares ya se cuentan con plataformas de compra, en las que te facilitan hacer estas cuentas y te muestran una selección de los vehículos que están a tu alcance.
4. ¿Qué modelos te gustan?
Ya que pasamos la dura realidad de lo que nuestra cartera nos permite, es momento de empezar a seleccionar a los candidatos. Te recomendamos empezar con una lista de 10 posibles vehículos e ir eliminando uno por uno hasta que llegues a tu carro ideal. Irás escogiendo las mejores opciones recordando tus respuestas de las preguntas 1 y 3 de este listado.
Ahora existen muchas variedades de autos, así que podrías al menos darte una idea tomando en cuenta estos ejemplos:
- Pequeños utilitarios: Peugeot 107, Kia Picanto, Renault Twingo
- Utilitarios: Seat Ibiza, Fiat Grande Punto, Ford Fiesta
- Compactos: Renault Megane, Opel Astra, Volkswagen Golf
- Berlinas: Renault Laguna, Ford Mondeo, Volkswagen Passat
- MPV (Monovolúmenes): podríamos diferenciar entre grandes (ej. Renault Space) y pequeños (ej. Renault Scenic)
- Todoterrenos, SUV y Crossover: Renault Captur TCe 100, Nissan Juke 1.6, Kia Stonic 1.0 T-GDI
- Coupés y deportivos: Mazda MX-5, Volkswagen Jetta GLI, KIA Stinger
- Cabrios: Peugeot 206 CC, Toyota MR2, Volkswagen New Beetle Cabrio
Si llegas a ver un modelo que te gusta, pero que está un poco lejos de tus finanzas, debes hacer por lo menos el intento de reorganizar tus gastos. Quizá haciendo unos recortes más puedas costear ese coche. Sin embargo, recuerda que siempre se trata de tener una economía estable.
5. ¿Se ve y funciona bien?
Una cosa es que por fuera sea una belleza, pero debes recordar que el funcionamiento es la prioridad. Si ya tienes más que claro cuál vehículo quieres, debes procurar hacer lo posible para probarlo. Se trata de que te sientas cómodo manejándolo y te cerciores de que está en buenas condiciones.
6. ¿Qué pasaría si tuvieras que venderlo?
Puede que sea el auto de tus sueños, pero siempre debes considerar que es un objeto y que por distintas razones quizá en el futuro tendrías que deshacerte de él. En este sentido, tienes que considerar qué tan nuevo o viejo debe ser el modelo que escojas y las reparaciones que tendrías que hacerle para venderlo.
Tarde o temprano necesitarás un vehículo, así que debes irte preparando para cuando llegue ese día. Al responder estas preguntas estarás en camino para subir al auto que fue creado especialmente para ti.