Vestirse es un arte que también tiene su ciencia, y cuando se trata de corbatas necesitamos conocer algunos principios básicos para lucir impecables con las mejores combinaciones.
Las corbatas son los accesorios que le dan un toque extra de formalidad a nuestra vestimenta, pero la mayoría de los varones creemos que la única diferencia que tienen es el color y no sabemos cómo combinarlas adecuadamente con nuestras camisas y trajes de vestir.
Cuando compramos corbatas nos dejamos llevar por los patrones y colores, pero dejamos de lado cosas como su tamaño o si podremos usarlas con diferentes atuendos. Debemos pensar en lo que vamos a usar y luego comprar una, no al revés.
Estos son siete principios que debemos considerar para saber combinar una corbata con nuestra apariencia formal y también casual:
1. Tamaño
La complexión de cada hombre es diferente, así que entre más grueso seas debes buscar corbatas más anchas y largas. Si eres más delgado y pequeño también debes buscar que este accesorio sea más adecuado al tamaño de tu torso. Pero en general una medida regular en la que puedes basarte es que tenga un ancho de entre 6 y 8.5 centímetros.
Ya seas robusto o delgado, el largo de la corbata usualmente debe ser suficiente para que toque la parte superior de la hebilla de tu cinturón.
2. Color
En este aspecto hay más libertad de elección, y es por eso que hay un amplio mundo de posibilidades. Hay hombres que combinan el color de la corbata con el del traje, con los zapatos o con el de otros accesorios como el pañuelo de bolsillo. Aquí es difícil decir que algo esté bien o mal, aunque por lo general se acepta que una apariencia discreta lleva corbata en tonos azules y verdes, mientras que un look para resaltar incluye una corbata en color rojo, ya sea brillante o quemado.
Algo que puedes tomar en cuenta para no equivocarte es el color de tu cabello. Los hombres más rubios necesitan colores de bajo contraste, pastelosos y de un solo tono. Quienes tienen cabello oscuro o un tono de piel más bronceado pueden jugar más con colores brillantes como rojo o naranja.
3. Patrones
Como es complicado establecer un estándar de su uso, las corbatas con patrones no son tan usadas como las de colores sólidos, pero quien sabe combinarlas tiene por seguro que su apariencia va a resaltar. El detalle principal a tomar en cuenta es si tu camisa y traje también tienen patrones.
Cuando el resto de la ropa tiene patrones como líneas o puntos, debes buscar que no se repitan en la corbata. Si ya usas una camisa a rayas, lo mejor es que la corbata tenga puntos o figuras muy pequeñas, y viceversa. También es buena opción no arriesgarse tanto y usar una con colores sólidos en estos casos.
Pero si tu vestimenta no tiene ningún patrón debes considerar cuál queda mejor, comenzando con líneas delgadas, después patrones pequeños, luego otros más grandes y, finalmente, corbatas con líneas gruesas y muy marcadas.
4. La camisa
Tanto para el color como para los patrones, lo que debes combinar en primer lugar es la camisa. Olvídate del saco del traje en este momento, porque ese podrías quitártelo, pero la camisa se queda contigo el resto del día.
Las camisas de colores sólidos son las más fáciles de combinar con corbatas porque solo debes buscar colores que se complementen. Si tiene patrones debes tomar en cuanta lo que vimos en el tercer punto, que los patrones no sean iguales.
5. El traje
Ahora sí pondremos atención al saco de vestir. Los trajes grises y azul marino se pueden combinar prácticamente con cualquier corbata, y aquí no hay mucho problema. El lío es cuando usamos trajes oscuros o de otros colores más claros.
Los trajes negros se ven bien con una corbata del mismo tono, pero aquí puedes ser un poco más atrevido y resaltar más si escoges colores sólidos brillantes y que tengan patrones sencillos. En el caso de los trajes claros, la mejor opción es combinar una corbata de colores oscuros. La cuestión es hacer un contraste de tonos.
6. Chaquetas deportivas y blazers
Estas son prendas menos formales que un traje, pero que se pueden ver muy elegantes con una corbata. La recomendación para los blazers es usar uno de seda suave a rayas de un color que las complemente. En cuanto a las chaquetas deportivas, el accesorio puede ser de tono sólido claro y con estampados.
7. Tela
Por lo general estos accesorios son de seda y se pueden combinar con diferentes atuendos. Pero cuando son de lana o tejidas se trata de algo más informal y la recomendación es llevarlas con trajes y sacos de tela suave. De nuevo, el punto es hacer un contraste.
Hay corbatas más formales que otras y también nudos de corbata que son más sencillos que otros. Pero esos detalles vienen después de estos principios elementales que siempre debemos tener en mente cuando usamos este accesorio que le da un toque de elegancia a nuestra apariencia.