Los viajes en el tiempo resultan fascinantes. Volver al futuro, Avengers, Flash, Los Simpson, Dragon Ball y hasta Harry Potter han tocado el salto en el tiempo como una herramienta para sus historias y en todas ellas advierten sobre las reglas de estos viajes y cómo se puede sobrevivir alterando los acontecimientos.
Pareciera que hacer un viaje así es imposible, pero varias teorías de la conspiración han apuntado a que supuestos viajeros en el tiempo han figurado en la historia, dejando una evidencia de su paso en fotografía y hasta en pinturas. Como es el caso de la obra The Expected One (El esperado), en donde, supuestamente, se puede ver a una mujer caminando mientras mira la pantalla de su celular.
Lo increíble de la pintura es que fue realizada en 1860 por el pintor austriaco Ferdinand Georg Waldmüller, quien retrató la espera de un joven con una flor en la mano, listo para cortejar a una dama que camina por el sendero. La pieza es exhibida actualmente en el museo Neue Pinakothek en Múnich, Alemania.
El “descubrimiento” fue por parte de Peter Russell, un exfuncionario local retirado del gobierno de Glasgow, Escocia, quien paseaba junto a su pareja por el museo que alberga arte de los siglos XVIII y XIX cuando se dio cuenta de que el cuadro congelaba la mirada de la chica a un objeto que sostenía entre sus manos, algo que en la actualidad atribuiríamos a un teléfono inteligente.
Russell destacó la importancia del contexto, ya que esto da pie a la interpretación de la obra. Con aparatos tecnológicos tan cercanos a nuestro cotidiano, la mirada hacia las manos es un gesto común para ver el celular, lo que haría que veríamos en la imagen a alguien actualizándose en sus notificaciones en la postura llamada “cuello de texto” cuando los celulares aún no se inventaban.
Lo que más me sorprende es cuánto un cambio en la tecnología ha cambiado la interpretación de la pintura y, de alguna manera, ha aprovechado todo su contexto.
—Peter Rusell para ‘Vice’
En la pintura original, la mujer va cargando algún libro, tal vez un breviario de oraciones o un himnario, algo alejado de un teléfono y un viajero en el tiempo. En Pinterest y en algunas redes sociales circula una imagen modificada de la obra con la incorporación de un cono de luz azul proveniente del objeto en las manos, lo que da la ilusión de que en verdad fuera un teléfono.