Cuando a los niños de la actualidad les dan regalos por su cumpleaños o Navidad, estos esperan recibir cosas como una tablet o una consola de videojuegos. Antes, si nos daban una figura de acción, éramos felices y nos dábamos por bien servidos.
Claro que también hubiéramos querido recibir un Nintendo 64, pero si nuestra familia no tenía los recursos suficientes, podíamos disfrutar las tardes con juguetes que eran más modestos, pero no por ello menos divertidos.
Para los chicos de hoy no tener un iPhone es imperdonable, mientras que para nosotros la niñez se resumía en ver quién tenía más tazos en la bolsa. Estos son 12 clásicos juguetes que nos alegraron la vida durante la infancia y que hoy muy pocos niños saben cómo usar. Son súper hábiles en sus videojuegos, pero no les pidas que bailen un trompo.
1. Tazos
Eran como la moneda de cambio de los niños y el que más tenía era el chico alfa del barrio. Hubo tazos de muchas de nuestras caricaturas favoritas como Pokémon, Dragon Ball, Looney Tunes, y Caballeros del Zodiaco. Eran un juego muy simple, pero que significaba casi casi tener propiedades valiosas.
2. Tronadoras
También conocidas como bolas traca-traca, ellas fueron las responsables de que nuestras muñecas quedaran destrozadas. Solo tenías que hacerlas chocar durante el mayor tiempo posible. Aunque hubo mucho dolor, las risas no faltaron.
3. Hielocos
Hasta que crecimos nos dimos cuenta de que se tenían que guardar en el congelador y luego ponerlos en las bebidas para enfriarlas. Pero cuando fuimos niños, se volvieron las piezas de muchos juegos en la calle y la casa.
4. Manitas pegajosas
Había de muchos modelos, unos muy baratos y otros bastante costosos con agarraderas y de gran tamaño. Lo divertido era que, en realidad, las usábamos cuatro veces porque se llenaban de tierra y basura.
5. Trompo
No se trataba solo de un juguete tradicional con el que aprendías a hacer trucos como el Carrusel o el Boomerang, sino que había verdaderas competencias locales y hasta de grandes ligas para quienes pudieran hacerlo bailar durante el mayor tiempo.
6. Super Soaker
En verano solíamos llenar globos de hule con agua para aventarlos y mojarnos, pero tener una de estas pistolas de agua era lo mejor del mundo.
7. Pizarra Mágica
Dibujar en estas pantallas era muy difícil y muchos nos sentíamos unos profesionales si lográbamos escribir nuestro nombre. Muchos niños dominaron esas pizarras y creaban joyas de arte en cuestión de minutos.
8. Figuras de Power Rangers
Los personajes de esta gran serie de televisión de los noventa se volvieron un ícono de la cultura infantil. Todos queríamos tener uno de los Power Rangers, de preferencia el rojo o el verde, y si eras afortunado podías tener los que se transformaban al presionarles el cinturón o incluso el Megazord.
9. Furby
Este era otro de los muñecos que causaron gran sensación porque tenían muchísimos modelos de colores muy locos. Fue el abuelo de las mascotas robots del presente.
10. Tamagotchi
Hablando precisamente de mascotas, el Tamagotchi fue el juego que nos metió en el mundo virtual en el que tenías que cuidar a un pequeño animal hecho de pixeles. Lo teníamos que alimentar, bañar, sacar a pasear y jugar con él para que no se nos muriera.
11. Tetris
Los que no podíamos tener una consola de Sega o Nintendo nos entreteníamos muy bien con estos videojuegos portátiles. Los podíamos llevar a todos lados y pasar horas de diversión hasta que se nos acababa la pila. Comenzamos con el juego de Tetris clásico, pero luego fuimos conociendo otros que venían en este dispositivo. La verdad es que no conocimos todos los 9999 que supuestamente traían.
12. Micro Hornito
Honestamente, ¿alguien lo tuvo? Todos lo deseamos. Es una leyenda urbana que alguien de verdad llegara a recibirlo como regalo. Tal vez nuestras hermanas pequeñas sí prepararon galletas y pastelitos en este genial juguete; y parafraseando un poco diremos que: si nunca tuviste un micro Hornito, sí tuviste infancia.