El Príncipe del Rap fue, sin duda, una de las mejores series televisivas de nuestra infancia, y es responsable de hacernos pasar momentos divertidos con sus ocurrencias.
El show en sí se desenvolvía con chistes simples, bromas graciosas y el famoso baile de Carlton. Pero tal vez recuerdes que también, en algunas ocasiones, el show intentaba tomar asuntos serios que retrataban la vida real.
Tal vez el episodio más famoso, y ejemplo de lo antes dicho, es el de “Papá Tiene Una Nueva Excusa” de 1994. En este episodio, Lou, el perezoso padre de Will, intenta entrar a su vida de nuevo después de 14 años ausente.
Sin embargo, y aunque el tío Phil puede ver que Lou es un gran patán y mentiroso, Will está muy contento por verlo y poder pasar tiempo con él. Sin embargo…
El episodio toma un tono dramático cuando Lou, como era de esperarse, se va de nuevo. La escena donde Will Smith lamenta que su padre sea un mentiroso es, sin duda alguna, una de las más emocionales e intensas interpretaciones que hayamos visto en nuestra infancia, un clásico absoluto que nos hizo llorar y que aún toca fibras sensibles cuando la recordamos.
Se dice que esta icónica escena fue totalmente improvisada, pues el director dejó que Will dijera y actuara como lo sintiera; y hay quien dice que Will se basó en sus propios problemas con su padre, quien lo abandonó cuando el era pequeño.
Excepto porque es una gran mentira….
En realidad, el padre de Will fue una persona que siempre estuvo presente en su vida y realización, apoyándolo en su carrera actoral y como cantante. Will explica:
“Le dije a mis padres que quería ser rapero. Ellos me dijeron ‘¿rapero?’ Mi madre se graduó de Carnegie Mellon, pensó que la universidad era la única manera de salir adelante. Mi padre veía las cosas de manera diferente. Acordamos que me tomaría un año haciendo música y que, si no funcionaba, iría a la universidad. Ese año gané mi primer Grammy por mejor artista rap”.
Pero, mientras la historia detrás de aquella escena no era verdad, las emociones puesta en ella por parte de Smith y Avery eran puras; interpretaciones convincentes dignas de admiración, que dejaron a la audiencia pasmada y emocionada.
Un usuario en Reddit cuenta que fue parte de la audiencia en ese episodio, y relata el momento dramático:
“Me encontraba en el set en ese capítulo. La audiencia se mostraba tranquila y silenciosa, aún en las partes cómicas, y yo no podía entender por qué. Antes de esta escena, Will Smith desapareció, para después regresar al plato y grabar la escena en una sola toma, y desapareció de nuevo. Todos pudimos ver que la gorra se le cayó. Usualmente el director llamaría por una segunda toma pero, realmente, nada podría remplazar ese momento. La gente seguía llorando cuando llamaron a corte. Tenía 10 años y nunca, jamás, lo olvidaré”.
Así que, tal vez la leyenda urbana del padre de Will no sea cierta, pero no cabe duda de que este episodio es uno de los más conmovedores que hayamos visto en una comedia de situación, y que Will Smith no sólo es un buen comediante, muchas películas en su haber respaldan que es un gran actor.