La Pantera Rosa fue uno de los mejores personajes de la infancia, pero su coche era uno de los más extraños que jamás se hayan fabricado.
Cada sábado, parte de la rutina de descanso de todo niño era encender el televisor para disfrutar una buena mañana viendo caricaturas. La Pantera Rosa fue una de las mejores series animadas que existieron y todos en algún momento se preguntaron si en realidad existió el coche color rosa que aparecía en la intro de esa caricatura.
Por supuesto que recuerdan la intro de la Pantera Rosa en la que se ve un vehículo color rosa que llega hasta el Hollywood Chinese Teathre. Era un coche bastante extraño, tenía una forma muy larga, un color rosa “mírame aunque no quieras” y la cabina del conductor estaba exageradamente separada en la parte frontal.
El panteramóvil fue uno de los autos más bizarros creados para una serie animada. Claro que en aquellos locos años de los sesentas quizá era de lo más normal que un niño anduviera conduciendo un extraño coche por Hollywood.
En 1969 la serie animada de la Pantera Rosa había alcanzado un gran éxito y para la nueva intro se pidió la creación de un exótico vehículo. La tarea solo podía haber sido encargada al hombre con mayor prestigio en diseño de coches de aquella psicodélica década de los sesenta.
El diseñador Jay Ohberg es reconocido en el mundo del entretenimiento por creaciones como el Troncomóvil de Los Picapiedra, los batimóviles de la serie protagonizada por Adam West y de la película Batman dirigida por Tim Burton, y por si fuera poco él diseño el fantástico DeLorean para la franquicia Volver al Futuro.
Con tanto éxito en su currículum, Jay aceptó el encargo y se inspiró en un Oldsmobile Toronado 69, un coche de siete metros de longitud. Para darle ese toque groovy, Jay colocó la cabina del conductor expuesta en el cofre delantero. El panteramóvil tenía un motor V8 de 7.0 litros situado en la cajuela.
Las puertas tipo gaviota dieron el toque de modernidad al coche y su lujosa sala mini-bar fue el detalle glamoroso para el coche de la Pantera Rosa. Ahora ya saben que la Pantera no solamente fumaba, sino que también bebía algunos tragos junto al Inspector Clouseau.
El panteramóvil ha sido vendido en dos subastas en el 2011. En la primera alcanzó un precio de 120 mil dólares y en la segunda fue vendido en 570 mil dólares, dejándole a su primer comprador una jugosa ganancia. En el 2016 se inició una restauración completa del coche por la empresa Galpin Auto Sports y se espera verlo de nuevo en las calles.
¿Alguien más siente ganas de nunca conducir este vehículo? Pero no digan sí, digan “Oui”.