Todos hemos sido cautivados por algún diseño de alguna cosa que hemos visto en algún lado, pero cuando estas cosas son caras, buscamos quien nos pueda hacer el mismo trabajo por un precio menor. También puede ser que no podamos tener acceso inmediato a esas cosas y le confiemos su fabricación o realización a alguien cercano. Y ni hablar de los pedidos por internet, porque lo que ordenamos siempre viene con algún defecto.
Siempre que hacemos esto, los resultados nunca son los esperados. Estas 25 personas pidieron ropa, pasteles, tatuajes y no obtuvieron lo que querían o buscaban. Seguro que te sentirás identificado con alguno de estos casos.