A veces construir una fuerza de voluntad inquebrantable podría ser un reto difícil, sobre todo si se trata de reducir el sobrepeso; y más aún si eres amante de la comida, sin distinguir entre la “chatarra” y la saludable.
Sin embargo, que tu sobrepeso u obesidad sea blanco de bulliyng complica aún más el panorama para cualquiera. Pero este joven pudo superar sus kilos de más y las burlas de sus compañeros.
Sebastian David, de Burnley, Lancashire, Inglaterra, se superó a sí mismo y logró convertirse en un culturista en solo siete meses.
Fue apodado Keith Lard -personaje de una serie de TV inglesas con sobrepeso- por sus amigos, debido a que había gastado más de 150 dólares en Greggs y Kentucky Fried Chicken cada semana, acumulando una masiva 5,000 calorías al día. Pero luego cambió su dieta y dejó de comer comida para llevar, y pasó de 88 a poco más de 66 kilos.
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Sebastian empezó a consolarse con la comida cuando supo la noticia de que su padre había sido diagnosticado con la enfermedad de la neurona motora en 2013. Cuando su padre falleció al año siguiente, decidió comenzar a cuidarse a sí mismo y sintió que también podría hacer algo útil por su madre y cuidarla.
“Mi madre está muy orgullosa de mí y feliz de que yo haya salido de un lugar que no era muy bueno para mí. A ella no le importaría si yo fuera gordo o delgado o lo que sea, con tal de que fuera feliz. Yo no me puse a competir en culturismo o hacer modelado, yo solo puse mi cuerpo en forma para sentirse mejor, pero una vez que lo logro voy a hacer una reevaluación de mis metas”.
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Después de superar la comida rápida, ahora a sus 28 años de edad su dieta consta de avena, huevos y arándanos para el desayuno, pollo, camote y brócoli para el almuerzo y salmón y patatas blancas para la cena.
Además se consiente con aperitivos o pasteles de arroz y mantequilla de almendra con frutas, pavo y arroz, batidos de proteínas y requesón y nueces.
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Y solo 15 meses después de levantar pesas por primera vez en años, Sebastian terminó séptimo en un concurso a nivel nacional.
Sin duda un gran cambio de hábitos.
