Para la gran mayoría de las personas este 2020 ha sido una crisis de estrés, ansiedad por no poder salir e incertidumbre total; sin embargo, para Kenny Dunn significó llegar al cuarto año de una vida sana y libre de alcohol.
La vida de este ingeniero ferroviario de 38 años se había descarrilado debido a su excesivo consumo de cerveza y alcohol. En el 2016 dio el primer paso: admitió que tenía un problema y buscó ayuda. Hoy su condición física y mental están mejor que nunca gracias al esfuerzo por mantenerse sobrio.
Kenny dice que hace cuatro años solía beber entre 12 y 14 bebidas alcohólicas al día, su pasatiempo favorito era recostarse en un sillón a beber y ver televisión, su alimentación no era balanceada, además, jamás hacía ejercicio.
Cuando decidió dejar el alcohol también se dio cuenta de que eso era solo el principio y que un cambio radical en su vida necesitaba más sacrificios, como sustituir los días ociosos en su sofá favorito por tardes de entrenamiento con pesas, mancuernas y pedaleando en una bicicleta fija. Poco a poco su barriga cervezera se transformó en un abdomen marcado.
Dunnn también buscó apoyo en centros de adicciones con expertos en alcoholismo, quienes lo acompañaron en sus momentos más dolorosos y oscuros. La batalla por la sobriedad era de Kenny, pero su familia y compañeros nunca lo abandonaron.
Fueron cuatro largos años de lucha constante, pero Kenny no se rindió; ahora el fruto de sus esfuerzos se notan y él comparte con todos su experiencia a través de un podcast llamado ¿Qué sigue? Evolucionando en recuperación. Sobre todo resalta que si alguien quiere ayuda para combatir su alcoholismo, es necesario pensar que dejar la bebida es el primer paso hacia una mejor versión de uno mismo.
Al principio de la recuperación, después de cada hito, siempre me decía a mí mismo: “Ok, ¿qué sigue?”, estar limpio y sobrio no es el resultado, ¡es solo el comienzo! La recuperación es un proceso de evolución y estoy buscando personas para mi podcast que hayan evolucionado mucho más allá.
– Kenny Dunn
En sus redes sociales este fortachón exalcohólico muestra en fotografías cómo fue su increíble transformación con el paso de los años. Ahora nosotros les compartimos sus imágenes como una motivación a que podemos ser mejores cada día; solo necesitamos dar el primer paso.