Ha pasado un cuarto de siglo, y los aficionados a los Pieles Rojas aún festejan el triunfo rotundo de su equipo 37-24 sobre los Buffalo Bills en el Super Bowl XXVI. Y es que, a poco menos de dos semanas par el Super Bowl LI, Chris Chase, escritor de Fox Sports, decidió clasificar a los 50 campeones del Super Bowl como en la escuela: del mejor al peor.
Siendo así, Chase llamó a los Pieles Rojas de 1991 “el equipo más subestimado en la historia de la NFL”, y dijo lo siguiente:
“Cualquier estadística puede probar mi punto (su margen de victoria en playoffs fue de 102-27), pero lo más revelador fue su relación de 43 capturas” dijo Chase.
Cada uno de los 50 campeones del Super Bowl tiene sus listas llenas de talento, de lo contrario, no habrían alcanzado el pináculo del éxito en el fútbol profesional, que es alzar el Trofeo Lombardi al final de la temporada.
Naturalmente, algunos de estos equipos tenían jugadores más conocidos que otros, pero ninguno deja de ser indispensable. Desde Mark Rypien, quien fue una figura elemental para la victoria de los Pieles Rojas, hasta Joe Montana, Tom Brady o Peyton Manning. Todos mencionados por Chase mientras continúa con su defensa del equipo de 1991.
“¿Cómo un equipo liderado por Rypien puede ser mejor que los de Montana, Brady o Manning?, ¿cómo puede una defensa que no estaba en el nivel de los 4-6 de Buddy Ryan, en Chicago, o de las unidades dominantes de Marvin Lewis en Baltimore ser la mitad de lo que es el mejor campeón de todos los tiempos?, ¿Cómo puede un equipo tan inolvidable como los Pieles Rojas del 91 ser listados por encima de los Vaqueros, Acereros, 49ers y los Patriotas que jugaron en los playoffs más famosos y tuvo a los jugadores más conocidos?”.
Para Chase, la respuesta a todas esas preguntas es muy simple: “es exactamente por lo inmemorables que eran. Los mejores hacen que parezca fácil”.
Chase ya había mencionado su impresión ante Rypien, pues fueron pocas las veces que lo capturaron o interceptaron, supieron jugar y utilizar lo que tenían en ese momento, por eso les fue de maravilla ese año, y lideraron la NFL con una puntuación de 485 puntos.
Las 8.5 yardas por pase de Rypien lo convirtieron en el segundo en la liga, y sus 3.564 yardas fueron las mejores en la NFC y las cuartas en la liga.
Tan buena como haya sido la ofensiva de Washington en ese año, la defensiva fue igual de buena, permitiendo sólo 224 puntos, los segundos más bajos en la liga de 1991. A eso súmenle su índice de rotación que fue de los mejores en la liga.
Estar en la cima, o cerca de la cima de la liga en todas esas categorías ayudaron tremendamente a los Redskins en 1991, ya que terminó la temporada con un récord de 14-2, más allá de los Falcons y los Leones en los playoffs de la NFC y venciendo a los Bills en el Super Bowl XXVI. Rypien ganó un premio MVP al completar 18 de 33 pases para 292 yardas, dos touchdowns y una intercepción.
Con esta victoria, los Pieles Rojas se convirtieron en el primer equipo, y Joe Gibbs en el primer entrenador, en ganar el título con tres diferentes quarterbacks, Joe Theismann (SB -XVII), Soug Williams (SB -XXII) y Mark Rypien (SB -XXVI)