El pasado fin de semana el piloto británico Lewis Hamilton ganó el Gran Premio de Russia de la Fórmula Uno y quedó a un paso del tricampeonato. Sin embargo la noticia no fue su victoria sino el festejo, el cual fue un poco accidentado.
Sucede que el presidente ruso Vladimir Putin subió al podio para felicitar a los ganadores y para entregarles sus trofeos, cuando -como parte de la tradicional ceremonia del triunfador- Hamilton destapó la botella de champagne y, para su mala suerte, bañó un poco al mandatario segundos antes de que éste se retirara del podio.
Putin subió al podio, saludó, aplaudió, le entregó a Hamilton el trofeo de campeón, y se retiró poco antes de que comenzara a llover champagne.
Sin embargo las imágenes y el video de la premiación muestran que el presidente ruso quedó en medio del ritual y se llevó un poco de espuma en la espalda.
Lewis Hamilton ha negado haber rociado con champán al presidente de Rusia y se disculpó públicamente por lo sucedido.
“No lo hice, en ningún momento le rocié con champán. No sé lo que se verá en las fotos, pero no quiero que me pase nada”.
Hamilton ya había criticado el pasado mes de abril por rociar con champán a una de las azafatas del GP de China directamente en la cara. Ese incidente provocó una ola de condenas en Gran Bretaña y Alemania, que acusaron a Hamilton de sexismo.
La propia azafata se convirtió en noticia y salió al paso para decir que no se sintió degradada por el bicampeón mundial.
Mira aquí el video del accidente: