El futbol es, sin duda, uno de los deportes que más pasiones despiertan y eso es doblemente cierto con la afición mexicana, que ama a su Selección de forma incondicional y la sigue, ya sea en las malas o en las peores (y, claro, en las menos comunes, buenas). Si algo no puedes reclamarle a la fanaticada mexicana es que le falte pasión por el deporte y por su equipo, al que adoran más allá de toda razón.
Haciendo honor a la fama emotiva de los entusiastas del futbol mexicano, que son tan rápidos para festejar y gritar a todo pulmón, entre risas como para rabiar y lamentarse amargamente, @lachitoangel, un usuario de TikTok mexicano, subió a la plataforma de videos cortos un tremendo exabrupto en el que se le ve atacando salvajemente a su pantalla televisiva tras la derrota 2-0 del tricolor frente a la Selección argentina el pasado 26 de noviembre. El video se volvió viral y todo el mundo le aconsejó al fan de México que se lo tomara con calma, pues mañana será otro día.
Con el corazón en el puño
¿Cuántas pantallas más, Tata Martino? ¿Cuántas pantallas más? pic.twitter.com/RvjnxP0P1i
— tacodealacran (@tacodealacran) December 1, 2022
La emotiva reacción del seguidor de la Selección Nacional mexicana que ocurrió cuando se formalizó la dolorosa derrota 2-0 de los mexicanos frente a los argentinos impactó fuertemente a todos aquellos que la presenciaron. El hombre, abrumado, desató su furia y frustración contra su pantalla televisiva, que terminó hecha un desastre inservible luego de la tremenda tunda que le arrimó el exaltado fanático.
El video, que ha sido reproducido 28.3 millones de veces al momento, ha merecido casi 20 mil comentarios y ha sido compartido más de 70 mil veces, muestra al aficionado golpeando, al ritmo de Si ya saben cómo me pongo, con los puños a su televisor. Luego pasa “a las cachetadas”, usando sus palmas para seguir infligiendo daño en el electrónico, como si fuera el culpable de la frustración de las ambiciones mundialistas del tricolor. Al final, la pantalla queda completamente estropeada y el inconsolable @lachitoangel se aleja de la escena del crimen casi con lágrimas en los ojos.
Ya cálmate, hermano
Quienes vieron el exabrupto por redes sociales realmente consideraron que la reacción del hombre, que se describe a sí mismo en su perfil de TikTok como un taquero en Estados Unidos, fue sumamente exagerada y le recomendaron que se tomara un respiro luego de su terrible rabieta. En general, los mensajes fueron de llamado a la cordura, pues la TV no había tenido la culpa, ni menos su familia, que se quedó sin posibilidad de usarla más.
Los comentarios iban desde los “estadistas” que decían “literal había 90 por ciento de probabilidad de que perdiera México y aún sabiendo eso, se enojan”, pasando por las feministas, que dijeron “Este es de los mismos que nos acusan a las mujeres de no controlar nuestras emociones”, los machistas que se preguntaron “imagínense cómo se pondrá con su esposa si así se pone por un partido” e incluso los reconciliadores, quienes le decían “amigo, no siempre se gana, sepa perder; muchos ánimos para México”.
Y las que faltan
El destructor de televisiones contestó a los comentarios con buen humor, aparentemente ya muy quitado de la pena tras el incidente, diciendo que su esposa lo había mandado a comprar otra pantalla luego de su “pequeña discusión” con la televisión en la que vio el partido, por lo que su berrinche no había servido de nada. Quizá es cierto lo que muchos espectadores teorizaron y la verdad es que estaba buscando una excusa para estrenar alguna pantalla que se comprara durante el Black Friday.
Sea como sea, en un video posterior no solo no mostró arrepentimiento, sino que afirmó que había actuado según sus propios deseos y que estaba dispuesto a hacerlo de nueva cuenta “de ser necesario”, asegurando que “si México no califica, vuelvo a quebrarla”. Sin embargo, como todos sabemos, México no logró calificar más allá de la fase de grupos en un revés histórico, pero aun así, no tenemos noticias ni nuevos videos en los que el tiktoker se desquite con su nueva TV. Puede ser que haya empezado a tomarse con más filosofía las cosas, pero también es posible que simplemente su bolsillo le doliera más que la derrota de su equipo.