El deporte ha sido tanto modo de vida como ritual de comunión con los dioses, evento para decidir sanamente las rivalidades entre naciones e incluso una excusa para jugar con los hijos. Hoy en día se ha vuelto, sobre todo, una modalidad de espectáculo sumamente explotable, de enormes ganancias, a partir de las que algunos deportistas logran crear grandes fortunas.
A pesar de que los atletas millonarios abundan, no muchos de ellos saben qué hacer con esa fortuna y terminan dilapidándola o perdiéndola por descuido, corrupción, robos, falta de planeación y por muchas otras razones. A continuación te presentamos a 15 deportistas que, a pesar de haber alcanzado la fama y la fortuna, terminaron perdiendo casi todo.
1. Mike Tyson
El que fue bautizado como el “Más Malote del Boxeo”, el hombre que una vez fue considerado invencible, con su poderosa ofensiva fue capaz de reunir más de alrededor de 300 millones de dólares, según fuentes serias, pero hay quienes estiman que superó los 430 millones.
¿En qué puede gastar alguien tal cantidad de dinero? Pues en lo de siempre: fiestas, alcohol, mujeres, automóviles, mansiones y… tigres. Sí, de hecho, mientras estuvo en prisión, su dealer de autos le consiguió tigres como mascotas que posteriormente pusieron en riesgo vida, pues los mantenía como gatos domésticos en su mansión de Las Vegas.
2. Deuce McAllister
Este running back de futbol americano llegó a tener 70 millones de dólares, pero se vio en aprietos financieros al tener un pleito con Nissan luego de que una concesionaria propiedad de McAllister quebrara en 2009. La disputa se prolongó por años e hizo mella en su imagen y finanzas.
3. Diego Armando Maradona
La fortuna de este futbolista argentino llegó a alcanzar los 43 millones de dólares y su pericia lo elevó al estatus de “Dios” entre los aficionados. Sin embargo, entre escándalos y problemas con el consumo de sustancias, su salud y su fortuna fueron desapareciendo hasta su muerte el 25 de noviembre de 2020.
4. O. J. Simpson
La fortuna de este futbolista de americano llegó a ser de 11 millones de dólares, hasta que se convirtió en figura central del “juicio del siglo” (el más publicitado de la historia), siendo acusado del asesinato de su esposa (Nicole Brown) y un amigo de esta (Ron Goldman). Aún siendo declarado inocente en 1995, en 1997 se le consideró responsable civil de las muertes y tuvo que pagar 33.5 millones de indemnización a la familia de Goldman, de la cual solo llegó a pagar 13 2849.53 dólares.
Su situación lo llevó a adoptar tendencias criminales y fue convicto en casos posteriores, entre otros cargos por asalto a mano armada, coacción y secuestro en 2007, en Nevada. Estuvo alrededor de 10 años en prisión, hasta 2017. La familia Goldman reclama actualmente el pago del resto de la indemnización que debe Simpson, que asciende a cerca de 70 millones de dólares.
5. Lawrence Taylor
Este linebacker exterior estadounidense llegó a reunir 15.45 millones de dólares durante su carrera profesional, pero su adicción a las sustancias, sobre todo a la cocaína, terminó arruinándolo. En el punto más bajo de su vida terminó siendo catalogado como un criminal sexual de bajo riesgo.
6. Sheryl Swoopes
Esta medallista mundial y olímpica de basquetbol estadounidense, la primera jugadora en conseguir que bautizaran unos Nike en su honor (los Air Swoopes), llegó a tener 50 millones de dólares en ganancias.
Swoopes fue una de las primeras atletas de alto perfil en declararse públicamente gay. Por malos manejos de su patrimonio, se declaró en bancarrota en 2004, declarando que tenía un millón de dólares en deudas.
7. Leon Spinks
El que una vez fue campeón mundial de los pesos pesados en la Asociación de Boxeo y que en 1978 derrotó al célebre Muhammad Ali en Las Vegas, cuya fortuna alcanzó los cinco millones de dólares, terminó trabajando como conserje en Nueva York.
Se cree que su fortuna fue desaparecida por malos manejos, representación corrupta y a problemas con la ley, no siempre culpa suya. Spinks fue diagnosticado con cáncer de próstata en 2020 y murió el 7 de febrero de 2021.
8. Dorothy Hamill
Esta patinadora medallista de oro olímpica, que fue apodada en su momento como “America’s Sweetheart”, llegó a tener cuatro millones de dólares a su nombre, antes de quedar desposeída.
Junto con su exmarido Kenneth Forsythe se lanzó a una empresa millonaria para salvar el show Ice Capades, que fracasó, dejándolos en bancarrota y debiendo cerca de 2.9 millones de dólares. Sin embargo, y a diferencia de otros en la lista, se recuperó económicamente y su actual fortuna es de unos cinco millones de dólares debido a sus emprendimientos posteriores en la industria del entretenimiento.
9. Marion Jones
Esta corredora, medallista de oro olímpica, confesó haber utilizado esteroides anabólicos para mejorar su desempeño, por lo que le fueron retiradas sus preseas. En su mejor momento tenía contratos de patrocinadores por un millón de dólares anuales y ganancias de entre 70 mil y 80 mil dólares por carrera.
Posteriormente se le acusó de abuso de sustancias y fue implicada en un caso de fraude, por el que fue sentenciada a cárcel para luego terminar declarándose en bancarrota. Jones llegó a ser parte de la WNBA.
10. Vince Young
Este futbolista americano llegó a reunir una fortuna de 35.39 millones de dólares, pero solo siete años luego de firmar un contrato de 25 millones de dólares con los Titans de Tennessee, el mariscal de campo se declaró en bancarrota en 2014, con una deuda entre uno y diez millones de dólares.
La razón principal de sus problemas económicos se debieron a su espectacular forma de gastar dinero. Young dijo que no mantenía mucho control de sus finanzas durante su carrera profesional y que dejaba la administración de su dinero a un consejero y a su tío.
11. Dennis Rodman
De orígenes humildes (familia de bajos recursos, con 46 hermanos), este astro del baloncesto alcanzó a acumular 27 millones de dólares en su momento y parecía ser un magnate bona fide.
Todo iba bien hasta que su adicción al alcohol, pago de pensión alimenticia de múltiple divorcios y multas de la NBA mermaron su fortuna hasta unos 500 mil dólares. Malas decisiones de inversión fueron igualmente problemáticas y desastrosas.
12. Darren McCarty
El célebre jugador de hockey canadiense tiene un problema muy claro en su economía: no gana como solía hacerlo antes, cuando llegó a acumular 15 millones de dólares. Bueno, eso y sus problemas con el juego, pues debía 185 mil dólares a tres casinos en Las Vegas. Además, una deuda de 6.2 millones de dólares lo obligó a declararse en bancarrota.
13. Mark Brunell
El mariscal de campo que ahora se dedica a entrenar llegó a acumular una fortuna de 50 millones de dólares durante sus 19 temporadas en la NFL, nueve de las cuales jugó para los Jaguars de Jacksonville. ¿Cómo terminó en bancarrota?
El modo en que Brunell perdió su fortuna fue en malas inversiones inmobiliarias, junto a otros dos compañeros de equipo, que luego del desmoronamiento del sector llevó al exfutbolista a perder casi todo. Otra de sus tristemente recordadas malas inversiones fueron nueve millones que metió en la franquicia de comida rápida Whataburguer.
14. Rollie Fingers
Este pitcher, junto con su particular bigote, llegó a reunir una fortuna de casi dos millones de dólares durante 18 temporadas de carrera profesional. Todo iba bien hasta que algunas inversiones cuestionables (en granjas de pistaches y turbinas de viento, por ejemplo) consumieron su fortuna, dejándolo finalmente en bancarrota, con deudas de cuatro millones de dólares y apenas unos 50 mil dólares a su nombre.
15. Lenny Dykstra
Este jardinero central tuvo fama de ser intrépido y dinámico durante su carrera profesional, imponiendo récords en su tiempo, entre otros el de bases robadas (105) en 1983, que permaneció vigente durante 17 años. Desafortunadamente, debido a su adicción a las drogas y al alcohol, se precipitó al fracaso.
En 1991 chocó su auto mientras viajaba junto con su compañero de equipo Darren Daulton y terminó sentenciado a tres años de prisión por manejar ebrio. Además, en una investigación de 2005, su hermano Kevin reveló que Lenny usaba metanfetaminas a mediados de los 90. Historia larga corta, sus malas decisiones de negocios lo llevaron a perderlo todo, al extremo que llegó a robarse a sí mismo para seguir con su estilo de vida, lo que le ganó una temporada en la cárcel.